Por si alguien no se había enterado, el domingo hubo elecciones autonómicas y municipales. Y, como siempre, todos ganaron y todo sigue igual. Ahora todos se enrollan contándonos que el resultado demuestra que acertaron y que los equivocados son los otros. Y algunos auguran lo que va a pasar el año que viene después de ver lo que pasó anteayer.
Quede claro que me parece una tontería considerar que unas autonómicas pueden darnos idea de por dónde van a ir los tiros de unas generales. Pero ya que todos lo hacen, no quiero perder la oportunidad y me subo al carro yo también.
Si queremos utilizar el resultado de estas elecciones para intuir el resultado de las próximas, lo primero es recordar que, si bien el PP consiguió más votos, el PSOE consiguió más ayuntamientos y más alcaldías, o sea, más poder territorial. Entonces eso nos podría sugerir que dentro de un año Rajoy y sus chicos podrían tener más votos que Zapatero. Pero ¿significaría eso que Rajoy va a ser el próximo presidente?
Yo creo que no. Por varios motivos. En primer lugar, porque el hecho de que haya tenido más votos ahora no significa que los vaya a tener el año que viene. En primer lugar, porque no es igual votar para la alcaldía de tu pueblo que para el Gobierno de la nación. En segundo lugar, porque, no necesariamente todos los que votaron al moderado Gallardón van a votar a Rajoy sabiendo que el exaltado y extremista Acebes va a tener un Ministerio en su hipotético Gobierno.
Y además, porque han tocado las narices a mucha gente. Cuando se insulta al Gobierno, se insulta a más personas. Cuando se miente, se ofende a muchas personas. Cuando se dice que todo voto que no vaya al PP va a ETA, se pierden apoyos. Cuando se dice que haber ganado en Madrid equivale poco menos que a haber conseguido la "joya de la Corona", se molesta a muchos de fuera de Madrid que ya no van a votar a Rajoy.
Por eso, ahora que en España somos tantos etarras y que, según Aznar, está a punto de estallar otra Guerra Civil, Rajoy debería ver qué hace. Podría cambiar de táctica y ser más dialogante, pero entonces perdería el apoyo de la línea más dura de su partido sin que nadie le asegurara que volvería a atraer a los más moderados. O podría seguir con la oposición dura y de derecha sin complejos, pero seguiría sin apoyos. Y entonces sólo podría gobernar si consiguiera una mayoría absoluta, porque ningún otro partido va a querer apoyarlo porque, según Aznar todos los demás partidos apoyan el terrorismo y esos insultos no suelen gustar.
Si creyera que estas elecciones nos dicen qué va a pasar el año que viene, diría que Rajoy debería hacer algo de autocrítica. Pero la autocrítica es difícil cuando se cree que los equivocados son todos los demás.
Quede claro que me parece una tontería considerar que unas autonómicas pueden darnos idea de por dónde van a ir los tiros de unas generales. Pero ya que todos lo hacen, no quiero perder la oportunidad y me subo al carro yo también.
Si queremos utilizar el resultado de estas elecciones para intuir el resultado de las próximas, lo primero es recordar que, si bien el PP consiguió más votos, el PSOE consiguió más ayuntamientos y más alcaldías, o sea, más poder territorial. Entonces eso nos podría sugerir que dentro de un año Rajoy y sus chicos podrían tener más votos que Zapatero. Pero ¿significaría eso que Rajoy va a ser el próximo presidente?
Yo creo que no. Por varios motivos. En primer lugar, porque el hecho de que haya tenido más votos ahora no significa que los vaya a tener el año que viene. En primer lugar, porque no es igual votar para la alcaldía de tu pueblo que para el Gobierno de la nación. En segundo lugar, porque, no necesariamente todos los que votaron al moderado Gallardón van a votar a Rajoy sabiendo que el exaltado y extremista Acebes va a tener un Ministerio en su hipotético Gobierno.
Y además, porque han tocado las narices a mucha gente. Cuando se insulta al Gobierno, se insulta a más personas. Cuando se miente, se ofende a muchas personas. Cuando se dice que todo voto que no vaya al PP va a ETA, se pierden apoyos. Cuando se dice que haber ganado en Madrid equivale poco menos que a haber conseguido la "joya de la Corona", se molesta a muchos de fuera de Madrid que ya no van a votar a Rajoy.
Por eso, ahora que en España somos tantos etarras y que, según Aznar, está a punto de estallar otra Guerra Civil, Rajoy debería ver qué hace. Podría cambiar de táctica y ser más dialogante, pero entonces perdería el apoyo de la línea más dura de su partido sin que nadie le asegurara que volvería a atraer a los más moderados. O podría seguir con la oposición dura y de derecha sin complejos, pero seguiría sin apoyos. Y entonces sólo podría gobernar si consiguiera una mayoría absoluta, porque ningún otro partido va a querer apoyarlo porque, según Aznar todos los demás partidos apoyan el terrorismo y esos insultos no suelen gustar.
Si creyera que estas elecciones nos dicen qué va a pasar el año que viene, diría que Rajoy debería hacer algo de autocrítica. Pero la autocrítica es difícil cuando se cree que los equivocados son todos los demás.